martes, 3 de noviembre de 2009

(Yo) pierdo.

Pierdo los abrigos que me regaló el sol.
Poco a poco, 
uno a uno,
van quedando abandonados.

En un bar,
en una plaza,
en la casa de algún desconocido.

Poco a poco, 
se alejan de (mí) y 
(yo)
los dejo ir.


Pierdo los abrigos que me regaló el sol.
y
el frío
se cuela por (mis) poros hasta hacerlos estallar.
Y, 
casi sin sentirlo, 
simplemente, 
desaparecen.


Pierdo los abrigos que me regaló el sol.
Algún día, volverán.
Mientras tanto, 
(yo)
bailo.